Cualquier parecido con la realidad no es coincidencia, es que es real como la vida misma.
El pasado sábado día 24 de junio, hacia la hora torera de la siesta ¡faltaría más!, se presentó en casa un “enviado del ayuntamiento” a traer una notificación, eso es como los de las compañías telefónicas o los que quieren venderte un nuevo contrato de la luz, a la hora de la siesta. Una voluntaria abrió la puerta, recogió la notificación y firmó el acuse de recibo.
Oí el timbre que me despertó pero lo que más me llamó la atención fueron las carcajadas que empezaba a escuchar.
— ¡Papá te ha tocado lo que más ilusión te hacer!
— ¿Qué pasa? ¿Quién era? – decía yo mientras me despertaba con el calor que caía.
— ¿Piensa un poco? ¿Qué es lo que más ilusión te haría? – Me decían entre risas y cachondeo de unos y otros.
— ¿A que me ha tocado en una mesa electoral? – Les dije después de pensar un poco
— ¡Eso mismo! ¡Premio! – Volvieron a reír presentándose en mi habitación – Toma, mira, lee…
Ellos saben que en 2021 ya fui presidente de mesa “por imperativo legal”, puesto que la junta electoral no admitió mi objeción de conciencia. Entonces yo era uno de los suplentes, y… ¡Oh casualidad! Ninguno de los titulares se presentaron, quedando mesa constituida con los tres suplentes.
— Le he dicho al hombre que tienes más de 65 años que por eso te puedes librar – Me dijo la que había recogido la notificación – él me ha dicho que lo alegues a la dirección que pone en la documentación.
Confieso que yo no sabía que una de las excusas es eso. Lo comprobé en la misma hoja del “Nombramiento y Citación de miembro de Mesa» (así con mayúsculas las tres palabras, literal).
Es “Nombramiento” porque el Estado me regala un título por el que piensa pagarme 70 euros por más de 14 horas presenciales y por mi habilidad de saber contar uno a uno los votos, saber leer un DNI y saber apuntar los resultados ¡Toda una fortuna! ¡Ya la querrían para sí en una jornada de trabajo los miembros de mesa de cualquiera de las innumerables comisiones que se instituyen en senado y parlamentos varios, o los perceptores de dietas por asistencia a plenos municipales de dos horas de duración en las que hablan 4 tíos y el resto sólo levanta la mano para votar, eso en el mejor de los casos!
Es “Citación” porque como no te presentes … ¡Ay de ti! Te amenazan con multas y hasta con penas de prisión. Si no quieres presentarte el propio documento te dice que hay motivos por los que te puedes “excusar”. El único concreto que explica es el de ser mayor de 65 años. No sea que se empiece a enterar el ciudadano que hay más motivos (pocos en realidad) y empiecen a llegar “excusas” masivamente al correo que te indican amablemente también en el propio documento.
Por último “Mesa”, que no se trata de ser la pata de un mueble sino que, como dice el Diccionario de la Real Academia, te hacen ser parte del conjunto de personas que dirige un organismo con diferentes cargos, como los de presidente, secretario, etc.
Volviendo al asunto que me enrollo. Ya no me hacía falta más. Tenía la “excusa” perfecta y el lunes ni corto ni perezoso, nada más levantarme, no se me fuera a pasar el plazo de los siete días que te dan para excusarte, envié un correo a la dirección que corresponde a la junta electoral de mi zona.
Tampoco sabía que hay una junta electoral Central, las Provinciales y las de Zona, si cada una tiene tres miembros ¿Cobrarán cada uno de ellos 70 € libres de impuestos por jornada de trabajo de 14 horas? ¡Eso debe ser un pastón!
Para responder mi correo escribí en el Asunto: “Renuncio a formar parte de la mesa electoral xx xxx x por ser mayor de 65 años” y lo explico en el correo, no vaya a ser que no quede claro y esta vez no me libre, diciendo:
“Habiendo recibido el día 24/06/2023 el nombramiento para ser presidente de la mesa electoral xx xxx x en el C.E.I.P. xxxxxxx el 23/07/2023 Renuncio a dicho nombramiento acogiéndome al derecho que tengo por ser mayor de 65 años. Como les debe constar a ustedes mi fecha de nacimiento es el xx/xx/1957.
Para que conste, lo comunico según indican las instrucciones que se adjuntan en dicho nombramiento.
Un saludo”
Al día siguiente, estamos ya a 27/6 a las 12:15, “La Junta Electoral de Zona”responde:
“Buenos días, para poderse excusar, debe adjuntar el nombrramiento y una fotocopia de su DNI. grACIAS.
Un saludo”.
Al pobre funcionario, funcionaria u lo que sea que responde a los correos le pasa lo que a mí, a veces pulso mayúsculas donde tocan minúsculas y viceversa, o le doy dos veces a la misma tecla, cosas de mayor.
Me quedo sorprendido de que me pidan esos datos ¿No son ellos quienes me han nombrado? En el nombramiento viene el D.N.I. ¿Porqué me piden que mande fotocopia?. Tanto el nombramiento como ese mismo correo viene firmado por el mismo organismo “La Junta Electoral de Zona” (Así, sin decir cual, aunque no seré yo quien les pregunte a ellos que zona es: se entiende que es la mía)
Le respondo lo más rápido que puedo, porque el escáner se me atasca de tan poco que lo uso ya, consigo escanear los documentos y les envío a las 14:18 (los malos tragos cuanto antes se pasen mejor):
“Aquí les envío los documentos solicitados para excusarme de la asistencia a la Mesa Electoral
Entendía que esa documentación ya disponen ustedes de ella puesto en el propio nombramiento viene mi DNI y no la piden donde indican el correo al que hay que enviar la excusa.
Un Saludo”
Dos días, dos, han tardado en examinar los documentos que me pedían y que ya tenían, para responderme esto el día 29 con un documento adjunto:
“Buenos días.
Su excusa ha sido tramitada y resuelta favorablemente.(la negrita y el subrayado es de ellos)
Por medio del presente le enviamos copia del acuerdo (ver documento adjunto), y le informamos que NO tendrá que presentarse a la constitución de la mesa el día 28 de mayo de 2023.
Un saludo.”
¿Cómo? ¿El 28 de mayo? ¿Qué no tengo que ir a la mesa el 28 de mayo? ¡Pero si estamos en junio y las elecciones son el 23 de julio! ¿Qué hago? ¿Les respondo al correo? Si respondo me imagino la cara del funcionario de turno y diciendo en voz alta al leer mi correo “¡Ya está aquí el tocapelotas este!”. Como viene anexo un documento oficial con un membrete lo abro, y empiezo a leer:
“ACUERDO DE LA ILTMA. SRA. PRESIDENTA DE LA JUNTA ELECTORAL DE ZONA DE XXXXXX XXXXXXXXXXXX EXCUSA 329” (Así todo con mayúsculas, ¡Tomayá!)
O sea que no soy el único tocapelotas hay, por lo menos, 328 más en mi zona. No está mal. Sigo leyendo:
En XXXXXXX, a de veintinueve de junio de dos mil veintiséis.
¿Cómo 2026? ¿Ya? Los jubilados a veces no sabemos qué día es de la semana, pero el año lo solemos controlar y los meses también, más que nada por la paga.
— -Verás tú como todavía no me libro – me digo. Sigo leyendo
Por aportada la precedente documentación por D. xxxxx xxxx xxxxx por la que se excusa del nombramiento del cargo de PRESIDENTE de mesa para el que ha sido nombrado por el Municipio de XXXXXXXXXXXXXXX ( Dto X Secc X Mesa x) para las Elecciones Generales de del día 23 de julio de 2023, regístrese y visto lo alegado por el solicitante, habiendo quedado debidamente acreditada la causa alegada con la documentación aportada, SE ADMITE dicha excusa, eximiéndole de comparecer a la mesa Electoral.
Puf, respiro hondo. Por lo menos aquí la fecha está bien y se admite mi excusa. ¡Me libro!. Continúa el escrito:
Notifíquese el presente acuerdo al interesado/a, haciéndose saber que contra el mismo no cabe interponer recurso administrativo electoral alguno.
Así lo acuerda, manda y firma la Iltma. Sra. Presidenta de la Junta; de lo que yo la Secretaria; doy fe
Y … ¡Para colmo no cabe recurso! ¿Pero qué voy a recurrir yo, o quien lo va hacer por mí?
A continuación viene un sello en azul, redondo el, con una leyenda que dice rodeando por arriba JUNTA ELECTORAL DE ZONA, en el centro el Escudo del Estado, y debajo y en mayúsculas la zona a la que pertenece.
Pero no queda ahí la cosa continúa:
DILIGENCIA DE NOTIFICACION.- Seguidamente teniendo a mi presencia al solicitante le notifico el contenido del anterior acuerdo por el que se le admite la excusa presentada, mediante entrega de copia del mismo y haciéndole saber que contra el mismo no cabe interponer recurso ; firma en prueba de quedar enterado y notificado de lo que doy fe.
¿Quién será ese solicitante que estaba allí delante? Yo no. Si se refiere a mí y basta con un correo para solicitarlo ¿Por qué dice que yo estaba allí presente? Y… ¿porqué da fe de ello?
El otro día hablando con un amigo sobre las votaciones me decía que “se supone que las juntas electorales velan por la limpieza del proceso y por la contabilidad de los votos”. Yo no sé si es misión de las Juntas Electorales hacer todo eso, pero si lo es y lo hacen como la chapuza de las comunicaciones con el ciudadano que acabo de mostrar, podemos dudar razonablemente de que también el proceso electoral hace aguas por parte de quien tiene que velar por su buena ejecución y limpieza. Tampoco es muy importante si el proceso se ejecuta con mayor o menor calidad.
La estafa del proceso de proceso de votaciones es repetir machaconamente que son “elecciones” y que ese día es la “fiesta de la democracia”, pero la realidad es muy otra: se vota para no elegir sino para dar poder a instituciones, los partidos, que ya eligen por nosotros antes durante y después de las llamadas impropiamente “elecciones”.
¿O no es así como yo lo veo?
¿Alguien me puede ilustrar de lo contrario?
¿Aun merece la pena ocuparse de la calidad y transparencia de un proceso que está viciado en origen?
José Manuel Vidal Villacampa
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